Alrededor de 2 millones de dólares fueron recaudados en el mayor concierto benéfico de Reino Unido en apoyo a las familias en Gaza
Hace poco menos de un mes, cientos de personalidades culturales españolas —entre ellas Pedro Almódovar y Rozalén— se sumaron en una acción colectiva que exigía al gobierno español cortar relaciones con Israel. Para sorpresa de muchos, apenas una semana atrás, el presidente de España anunció nuevas medidas contra el Estado israelí “para detener el genocidio en Gaza”, con la promesa de incrementar la presión diplomática. “[El Gobierno español] ha decidido dar un paso más y poner en marcha de forma inmediata nueve acciones adicionales para detener el genocidio en Gaza, para perseguir a sus ejecutores y para apoyar a la población palestina”, declaró el mandatario.
El pasado miércoles 17 de septiembre, Wembley fue el epicentro del mayor concierto benéfico realizado en el Reino Unido en apoyo a Palestina, hasta la fecha. Together for Palestine, anunciado a finales de julio y organizado por Brian Eno junto al palestino exiliado Malak Mattar, tomó lugar en la OVO Arena Wembley, con el propósito central de recaudar fondos para las familias en Gaza. “Esta es una oportunidad para mantenernos unidos y decir: ‘Esto no puede continuar’”, había declarado Eno días antes.
Unas pocas horas antes del concierto, un video de un minuto que reunía a 40 celebridades circulaba por las redes. Desde Billie Eilish hasta Cillian Murphy y Joaquin Phoenix, todos alzaban su voz contra la guerra, pidiendo un alto al fuego inmediato. “Es importante hablar ahora, mientras está pasando. Presiona a tu gobierno, apoya a quienes protestan pacíficamente, pide un alto al fuego, detén la matanza”, señalaban. Y una de las apariciones más destacadas fue la del actor español, Javier Bardem, quien concluyó con: “Aquí vamos a estar con ellos hasta que Palestina sea libre”.
Durante casi cuatro horas, un total de 69 músicos, actores y activistas se presentaron en el escenario. Portishead, Gorillaz, Nadine Shah, Neneh Cherry y Annie Lenox, fueron algunos de los artistas que marcaron el pulso del evento, donde albergaron alrededor de 12.500 asistentes. En adición, una transmisión exclusiva en Youtube fue seguida al mismo tiempo por miles de espectadores en todo el mundo, superando los 70 mil dólares en donaciones en línea. Entre la venta de entradas —que sumó medio millón de libras (casi 700.000 dólares)— y la recaudación final anunciada por la presentadora Jameela Jamil, el evento ascendió a la cifra de 1.5 millones de libras (2 millones de dólares).
Una eficaz iniciativa que contribuyó a la recaudación de fondos fue una línea de productos diseñados específicamente para el evento, que incluía desde camisetas hasta el tradicional keffiyeh de Oriente Medio. Los artistas a cargo de los diseños fueron Ayham Hassan, Bella Freud, Katherine Hamnett y Priya Ahluwalia.
No solo estuvo presente la música. En el escenario aparecieron también personalidades del cine y el teatro. Benedict Cumberbatch, conocido por interpretar a Doctor Strange, sorprendió al compartir un poema del escritor palestino Mahmoud Darwish, dejando de lado el teleprompter que hablaba de los muertos palestions que ascienden al cielo “con una sonrisa”. Por su lado, Richard Gere también rompió con el guión planeado y transformó su discurso sobre los médicos en Gaza en una invitación a su “caravana de amor, compasión y baile”. Junto a ellos, también se presentaron Florence Pugh, Ramy Youssef y otros invitados.
La presencia palestina, tanto de músicos como de oradores, fue la que más causó una impresión entre los asistentes. El pianista Faraj Suleiman, quien nunca había tocado ante tal magnitud de personas, se destacó acompañado de su trío de jazz progresivo. La periodista Yara Eid, habló sin filtros sobre los 270 periodistas asesinados en Gaza. Y Nael Barghouti, uno de los palestinos que más pasó tiempo en las cárceles israelíes, para después ser liberado en un intercambio con Hamás.
Con este evento, se reafirma el espíritu de protesta que hay actualmente en el mundo del arte, desde la música hasta el entretenimiento. Para esta ocasión, fue el emblemático escenario de Wembley que reunió el arte, la política y la reflexión.
Fuente: https://es.rollingstone.com/