La batalla por Los Ángeles ¿Conflicto binacional o crisis inducida?

Sonora Power por Demian Duarte

0
20

Dice una regla en la vida que si piensas mal acertarás y la crisis en la ciudad de Los Ángeles en California tiene todas las trazas de ser un conflicto inducido en el ánimo de generar el máximo ruido posible y así obtener distractores que le permitan al gobierno de Donald Trump tomar oxigeno, luego de un par de semanas en las que el juego no ha estado a su favor.

Preocupa que en estos tiempos la perversidad de algunos, pueda llevar a un conflicto mayor entre los dos socios comerciales.

Trump primero tuvo reveses judiciales que le impedían seguir con su alocada política arancelaria, mismos que aunque fueron anulados, mostraron que no necesariamente la manera impulsiva de hacer las cosas de Donald Trump tiene todas las de ganar y que muy posiblemente la estrategia jurídica de gobiernos con los que tiene relación Estados Unidos a nivel de tratados comerciales y sobre todo de las corporaciones afectadas, podrán revertir en el futuro esa loca idea querer resolver los problemas de su país, echándole la culpa a todos los demás.

Después se vino el conflicto y ruptura con Elon Musk, un asunto que para mi gusto venía anunciado desde el inicio, pues sus egos son demasiado grandes y los intereses que uno y el otro representan, eventualmente entrarían en conflicto, hasta llegar a una ruptura como la de la semana pasada.

No hay que olvidar que Musk, que es el capitalista más rico del mundo en estos momentos, fue el mayor promotor y patrocinante de la campaña del republicano y que su salida del escenario plantea para Trump la mayor crisis en los 4 meses y medio que lleva en el poder.

Bajo ese enfoque, tengo la sensación de que para desviar la atención de lo que pasa en Washington, los halcones que rodean a Trump buscaron la manera de llevar las miradas a otro escenario y qué mejor que la California gobernada por los demócratas, una tierra además poblada por una mayoría de personas con ascendencia latina, y en particular mexicana.

Hacer redadas contra objetivos en la comunidad migrante y ademas hacerlo con exceso de violencia y prepotencia, es la mejor estrategia para provocar una reacción airada y posiblemente violenta de la comunidad latina de Los Ángeles, que no se distingue tampoco por ser muy dejada.

Con estos actos, y la detención de 42 personas, Trump logró su objetivo encender las llamas de la protesta y logró ademas las imágenes que justifican su retórica antimexicana a ojos y oídos de la opinión pública estadounidense y más aún, a los ojos y oídos de sus electores, que al final del día es lo único que le importa al ocupante de la Casa Blanca.

Está visto que a Trump los acuerdos comerciales, los derechos humanos, el derecho internacional y lo que diga u opine la comunidad internacional, es algo que lo tiene sin cuidado, y si ya encontró una l{línea argumental y un pretexto, además de una retórica exacerbada, en donde habla de la ciudad de Los Ángeles como una que está en mando ilegales y criminales, estás logrando sus objetivos.

Mandar a la Guardia Nacional y al Ejercito para supuestamente hacerse cargo de la situación es otro ardid publicitario y ahora el acto de Kristi Noem, de culpar a México y en especial a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo de esas manifestaciones causadas por ella misma como secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, es un acto supremo de manipulación, para de nueva cuenta encontrar que la culpa de los problemas de su país, es de alguien en el exterior.

Claro en México la presidenta Sheinbaum se apresuró a desmentir ese despropósito, mostrando además lo que dijo desde el lunes acerca de las manifestaciones violentas en Los Ángeles, rechazando la violencia y pidiendo a la comunidad de mexicanos en Estados Unidos conservar la calma y no caer en provocaciones.

Evidentemente esta es una historia en desarrollo. Se tiene prevista la visita del subsecretario de estado y ex embajador de los Estados Unidos en México Christopher Landau a Palacio Nacional este miércoles.

También se espera para la semana próxima la gira de Sheinbaum a Alberta, Canadá, a fin de participar como invitada a la cumbre del G7, espacio donde buscará su primera reunión bilateral con Trump.

Este miércoles se verá que tan a profundidad puede ir una infamia como la planteada por la secretaria Noem contra Sheinbaum, pero de buenas a primeras este affaire nos ha permitido darnos cuenta de qué voces y en que niveles está conspirando contra México y apoyando la política intervencionista de Donald Trump y los Estados Unidos.

Una vez más se confirma la especie de que los Estados Unidos no tienen amigos, solo tienen intereses y su interés por México es mucho mayor de lo que nos imaginamos.

Correspondencia a demiandu1@me.com | En X @Demiandu