El día de hoy, se aprobó en el H. Congreso del Estado de Sonora un par de iniciativas propuestas en meses pasados por el diputado de Partido Verde, Luis Mario Rivera Aguilar, que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente y de la Ley de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano del estado de Sonora.
Estas iniciativas tienen un objetivo claro y concreto: tener ciudades más verdes. Los beneficios de ciudades que cuenten con una alta proporción de áreas verdes por habitantes son múltiples; una mejora de la calidad del aire, control de temperatura urbana, integración social y actividad física para los usuarios.
La importancia de estas iniciativas se encuentra con la necesidad de generar más y mejores espacios públicos verdes para nuestras ciudades. En ese sentido, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las ciudades deben disponer como mínimo, 9 metros cuadrados de área verde por habitante distribuidos de manera equitativa en relación con la densidad de población. Según datos de la Dirección de parques y jardines de Hermosillo, apenas se cuenta con una proporción de 4.5 metros cuadrados por habitante. Esta iniciativa pretende asegurar el derecho a un medio ambiente sano al garantizar que el estado por lo menos asegure de 10 a 15 metros cuadrados de área verde por habitante.
Por otro lado, se debe asegurar que todo desarrollo inmobiliario en el Estado destine una mayor proporción a Espacios Públicos Verdes.
La legislación estatal establece que los desarrollos inmobiliarios deberán ceder áreas para garantizar la superficie necesaria de equipamiento urbano, áreas verdes y reservas territoriales. Por lo mismo, se considera el 12% de la superficie vendible urbanizable, del cual, 9% será destinado para equipamiento urbano y 3% para áreas verdes, pero este porcentaje no garantiza un espacio suficiente para la existencia de estos espacios en la proporción que establece la Organización Mundial de la Salud.
Por lo mismo, nuestra iniciativa pretende aumentar el porcentaje de áreas verdes del total de la superficie donada al estado, asegurando que cada constructora destine el 5% para espacios públicos verdes.