La cadena agroexportadora del jitomate mexicano involucra a más de 33 mil productores, 85 empacadoras, y 170 importadores en Estados Unidos, la cual genera más de 57 mil empleos en ese país.
El precio de las ensaladas aumentará más de 11.54 por ciento en Estados Unidos si cobran un arancel a las exportaciones de tomate rojo mexicano, alertó el Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
“De imponerse la cuota (de arancel al tomate rojo), los consumidores estadounidenses enfrentarían un aumento inmediato de precios, estimado en 11.54 por ciento, impactando directamente productos básicos como ensaladas, salsas y catsup”, afirmó el organismo dirigido por Jorge Esteve Recolons.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos anunció la imposición de una cuota compensatoria del 20.91 por ciento al jitomate mexicano.
“Esta medida aún no es definitiva y se encuentra sujeta a revisión en un proceso de 90 días que concluirá a mediados de julio”, recordó.
El CNA aseguró que “respalda plenamente a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, así como al secretario de Agricultura, Julio Berdegué, y al secretario de Economía, Marcelo Ebrard, en su firme defensa de los intereses del sector agroalimentario mexicano ante esta posible medida injustificada”.
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“Hoy México abastece el 90 por ciento del jitomate importado por Estados Unidos”, recordó el ente que agrupa a los productores agrícolas mexicanos.
El jitomate es un producto altamente perecedero, estratégico y difícil de sustituir, expresó.
La cadena agroexportadora del jitomate mexicano involucra a más de 33 mil productores, 85 empacadoras, y 170 importadores en Estados Unidos, la cual genera más de 57 mil empleos en ese país.
Los empresarios mexicanos generan una producción económica de 9 mil 200 millones de dólares de tomate rojo y aportan una recaudación fiscal de mil 500 millones de dólares, de acuerdo con cifras del USDA.
El CNA hizo un llamado a preservar la certidumbre, el comercio basado en reglas claras y la integración agroalimentaria de América del Norte.
“Reiteramos nuestra confianza en que, durante este periodo de revisión de 90 días, el Gobierno de México logrará, mediante el diálogo institucional, una solución que evite afectaciones a los consumidores de Estados Unidos y proteja la competitividad regional”, concluyó.
