Las menores quedaron atrapadas por el agua en el campamento Mystic, en el condado de Kerr, tras las lluvias e inundaciones registradas en Texas.
En medio de la catástrofe y la desgracia que se vive en Texas, surgen manos y voluntades que ayudan a proteger y rescatar personas afectadas, sin importar origen étnico, situación económica o condición migratoria.
En el río, entre los escombros y por aire, todos unidos en una causa: encontrar supervivientes.
Silvana Garza Valdez y María Paula Zárate son dos mexicanas que lograron salvar a 20 niñas que quedaron atrapadas por el agua en el campamento Mystic, en el condado de Kerr. Ahí, las jóvenes trabajaban como monitoras.
Relataron que la lluvia, que comenzó durante la noche del 3 de julio, se intensificó durante la madrugada, hasta provocar el desbordamiento del río Guadalupe.
A oscuras y bajo la tormenta, Silvana y María Paula guiaron a las pequeñas a zonas seguras para poder resguardarse.
“Yo sentí que estaba en un sueño, no pensé que fuera verdad y nunca entendí la gravedad del asunto hasta que lo vimos cuando salimos en los camiones de la Army. Fue algo terrible porque hace unas semanas nosotras estábamos durmiendo en esa sucursal de campamento”, narró Silvana Garza Valdez.
Cuentan que realizaron actividades para distraer a las más pequeñas, y tomaron otras medidas.
“Pensamos que también nos iban a evacuar, entonces empezamos a escribirnos nuestros nombres en la piel, donde se nos viera”, comentó por su parte María Paula Zárate.
Habitantes de la zona que no resultaron afectados y rescatistas voluntarios se trasladaron para ayudar a mover tierra, lodo y a levantar escombros, con la esperanza de encontrar sobrevivientes.
Ilda Mendoza, empleada del condado Kerr, dijo que “conocíamos a una familia de unos 70 años que estaba desaparecida y esperamos a que se despejara el camino. El 5 de julio llegamos y buscamos unos 16 kilómetros. Finalmente encontramos dos cuerpos: una niña y un niño”
“Es el mejor final posible para este escenario, pero reconocemos que tres días después, probablemente haya bastantes personas que, lamentablemente no sobrevivieron”, comentó por su lado Daniel Ramírez, voluntario de búsqueda y rescate.
